La propuesta está respaldada por Podemos Siero, que reivindica una mayor presencia femenina en el callejero de la localidad
Araceli Fernández García nació en Lugones en 1912. Desde joven estuvo muy comprometida política y socialmente, participando en la Guerra Civil en defensa de la democracia y la República. En 1937 fue exiliada a Rusia junto a los niños de la guerra, realizando labores de educadora e incluso de madre para estos menores.
Allí sufrió los avatares de la II Guerra Mundial colaborando con el ejército aliado que logró derrotar al fascismo. Después de resistir durante meses el cerco de Leningrado, fue evacuada a Crimea, donde nació su hijo. 8 años después, en 1957, regresó a Lugones, donde residió en la zona conocida como los Bloques de la Sindical. Su vuelta a España estuvo marcada por la represión de la dictadura franquista y por las dificultades para sacar a su hijo adelante en solitario.
Para mantener viva su memoria y reivindicar su historia, la Asociación Niños de Rusia solicitará al Ayuntamiento de Siero que uno de los espacios públicos de Lugones lleve el nombre de Araceli Fernández.
La propuesta cuenta con el respaldo de Podemos Siero, cuya concejala, Silvia Tárano, acudió a la presentación de la iniciativa. “Como sociedad, tenemos una deuda con todas las personas que sufrieron como ella y, como administración, tenemos que sembrar su recuerdo para que nunca nos olvidemos de que fueron ellas quienes lucharon por libertades y derechos que hoy disfrutamos”, apuntó la edil, quien añadió que “un espacio dedicado a Araceli, además de dignificar a alguien que participó como luchadora antifascista en dos guerras que marcaron la Europa del siglo XX, contribuirá a paliar la incomprensible ausencia de calles dedicadas a mujeres en Lugones”.
Por su parte, Francisco Lago Cuesta, presidente de la Asociación Niños de Rusia, destacó “el compromiso por mantener la memoria de lo que hicieron nuestras madres y padres” e incidió en la importancia de “que se sepa, se identifique y se tenga conocimiento de la verdadera historia de estos niños exiliados a Rusia”. En el caso de Araceli, abundó, “es más que una heroína y por su compromiso incluso antes de partir y su lucha cuando regresó, merece mucho más que una calle, merece un pueblo entero”.
En la presentación también estuvieron presentes el hijo de Araceli, Alberto Fernández y su nieta, Laura Fernández, que calificaron la propuesta de “muy ilusionante” y recalcaron “el orgullo” por su madre y abuela.