Unaminimidad
Propuesta de acuerdo:
Llevar a cabo en cada Pleno Municipal la lectura de los nombres de las víctimas de violencia de género de cada período seguido de un minuto de silencio en el lugar y forma que se establezca por mayoría de la Comisión de políticas sociales.
Enmienda:
Tras la finalización del Pleno Ordinario del mes de Noviembre de cada año, instar a todos los miembros de la Corporación a llevar a cabo un minuto de silencio en la Plaza del Ayuntamiento en la lucha contra la erradicación de la violencia machista.
Preámbulo
Naciones Unidas en una de sus resoluciones dice que “la violencia por razón de género contra la mujer está arraigada en factores relacionados con el género, como la ideología del derecho y el privilegio de los hombres respecto de las mujeres, las normas sociales relativas a la masculinidad y la necesidad de afirmar el control o el poder masculinos, imponer los papeles asignados a cada género o evitar, desalentar o castigar lo que se considera un comportamiento inaceptable de las mujeres. Esos factores también contribuyen a la aceptación social explícita o implícita de la violencia por razón de género contra la mujer, que a menudo aún se considera un asunto privado, y a la impunidad generalizada a ese respecto.”
Además, el Convenio de Estambul, acuerdo vinculante del Consejo de Europa ratificado por España, recoge entre sus objetivos:
a.- proteger a las mujeres contra todas las formas de violencia, y prevenir, perseguir y eliminar la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica;
b.- contribuir a eliminar toda forma de discriminación contra las mujeres y promover la igualdad real entre mujeres y hombres, incluida mediante la autonomía de las mujeres;
c.- concebir un marco global, políticas y medidas de protección y asistencia a todas las víctimas de violencia contra las mujeres y la violencia doméstica;
d.- promover la cooperación internacional para eliminar la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica;
e.- apoyar y ayudar a las organizaciones y las fuerzas y cuerpos de seguridad para cooperar de manera eficaz para adoptar un enfoque integrado con vistas a eliminar la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica
Por tanto, como administración pública, tenemos, no solo el deber moral, sino también la obligación legal de llevar a cabo actuaciones que pongan de manifiesto nuestro compromiso con la erradicación de una violencia que se reconoce presente en todos los ámbitos de nuestra sociedad y que tiene su mayor y más trágico exponente en los 1.237 asesinatos de mujeres registrados desde 2003, 52 de ellos en el presente año.
En un contexto donde algunos sectores reaccionarios tratan de negar y así invisibilizar esta realidad, debemos demostrar que la lucha contra la violencia machista tiene que ser un eje transversal en nuestra actuación como personas con cargo público, trasladando así a quienes puedan estar sufriendo esta situación nuestro apoyo y nuestra solidaridad, al margen de nuestra posición ideológica.